Comer solo, un nuevo suceso de definición de la salud y demanda de pureza en los productos alimenticios, son algunas de las tendencias de aquellos consumidores.

Permutas sin precedentes en los estilos de vida y patrones alimenticios, una amplia demanda de comida saludable y elecciones más éticas y deseo de los consumidores para conocer más acerca de los alimentos que eligen, están incitando tendencias radicales en la industria alimentaria para los próximos años. Por lo cual, los cambios en el comportamiento de compra de alimentos de consumo permanecerá.


Según algunos estudios realizados, el año pasado un 72% de los consumidores cocinaron más en casa que en 2015. Lo cual indica que uno de cada tres preparadores de comida modificaran su estilo de cocinar a uno mucho más aventurero, además de encerrar más frutas y verduras.

Varios de los alimentos y bebidas más vendidos el año pasado atendieron a los rituales de los consumidores en casa, como así también su estilo de vida dentro del hogar. A pesar de que las muertes adolescentes presuntamente relacionadas a preocupaciones sobre alto consumo de unidades de cafeína y bebidas energéticas, resulta ser el consumidor de más veloz crecimiento de los productos empaquetados.

Entre las categorías de alimentos más extensas, que a su vez incluye bebidas energéticas y vino, podemos encontrar el agua embotellada cuyas ventas subieron un 4,7%, cerveza 4.5% y queso natural 2.8%; al mismo tiempo subieron los bocadillos salados, bollos de pan fresco, bebidas carbonatadas, leche y chocolate.

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